La fertilidad de los suelos es un componente fundamental en los sistemas productivos de cualquier zona. Es importante conocer los factores inherentes a la zona donde se aplican los manejos, de modo de lograr los mejores resultados. Los suelos deben utilizarse con conocimiento de su capacidad de uso, de modo de obtener el mejor desempeño en cada caso. Ello implica un ordenamiento predial y la definición de prioridades de trabajo, como habilitación de suelos, fertilización, establecimiento, subdivisión, cultivos, conservación, enmiendas, etc.